Rescataron a 79 mujeres víctimas de redes de trata de personas

LUNES, 25 de septiembre 2017.- El dato nace a partir de un informe elaborado por el Equipo Diocesano de Pastoral Migratoria de la Diócesis de Río Gallegos, en el periodo comprendido entre junio de 2016 y julio de 2017. o.

Enmarcado en el Día Internacional contra la explotación Sexual y el Tráfico de Mujeres, en la jornada del sábado el Equipo Diocesano de Pastoral Migratoria de la Diócesis de Río Gallegos anunció en conferencia de prensa la elaboración de un informe sobre los casos de trata que tuvieron lugar en la provincia de Santa Cruz entre el periodo de junio de 2016 y julio de 2017.

De acuerdo al informe al que pudo acceder La Opinión Austral, fueron 79 las mujeres rescatadas en esa provincia, con edades que oscilan entre 20 y 36 años, siendo estas en su mayoría de nacionalidad argentina. Además se halló a mujeres de nacionalidad paraguaya, dominicana, brasileña y chilena.

De acuerdo a los datos recabados por el Equipo Diocesano, no se encontraron niños o niñas en situación de prostitución, ni tampoco varones mayores de edad.

Respecto a los responsables de las redes de trata, el informe remarcó que en su mayoría eran varones argentinos con vínculos entre ellos que hacían “rotar” a las víctimas entre sus prostíbulos, siendo estos locales comerciales como bares y whisquerías.

Desglosando los procedimientos realizados por las fuerzas armadas, el trabajo elaborado por el Equipo Diocesano indicó que dos procedimientos dispuestos por el Juzgado Federal de Río Gallegos fueron llevados adelante por la Policía Provincial, mientras que en los restantes allanamientos, dispuestos por los juzgados federales de Santa Cruz y Chubut, las fuerzas intervinientes fueron las policías federales de cada provincia. Además en uno de ellos actuó personal de Prefectura Naval.

En otro tramo del trabajo realizado por la entidad remarcaron que en todos ellos se encontró dinero en efectivo, anotaciones sobre el funcionamiento del local, teléfonos celulares, registros de “pases”, computadoras, comprobantes de giros de dinero, pasajes y documentos de identidad retenidos a las víctimas.

Desde el Equipo Diocesano denunciaron que en todos los procedimientos, la Justicia se limitó a clausurar el local y los responsables, tras ser acusados del delito de trata de personas y fijar domicilio, recuperaron su libertad.

En una apreciación hecha por el ente realizador del informe, subrayaron que en todos los procedimientos policiales se recolectaron pruebas que ratificarían que el negocio de la prostitución es anexo a los de droga y armas.

En conferencia de prensa, Rosa Díaz, delegada del Equipo Diocesano, expresó su preocupación ante este panorama: “desde la Pastoral venimos trabajando en la sensibilización y concientización de este problema social que tenemos tan instaurado, que hace que las mujeres no vivan su vida dignamente y plenamente”.

Díaz indicó que la entidad aborda la problemática desde dos flancos, siendo uno las migraciones y el otro, la concientización, “por eso la idea es dar a conocer estas alarmante y preocupante situación, queremos que de alguna manera sean visibles para el resto de la comunidad”.

Desde la unidad de la Pastoral Migratoria, Milagros Pierini indicó “este delito nos compete, ya que hay una gran cantidad de mujeres involucradas que son migrantes, por ello nos preocupamos y llevamos adelante actividades de sensibilización, entendiendo que sin prostituyentes no hay trata, tratamos de cortar el problema desde un inicio”.

“La Policía debería ser el brazo ejecutor de la Justicia, tiene que ser una herramienta para que se corte este flagelo, muchas veces la Policía es cómplice”, denunció Pierini y encomendó a las instituciones a “activarse, más allá de recuperar a las víctimas, tienen que respaldarlas, darle apoyo, sino son doblemente victimizadas” y fundamentó que “en muchos casos, las mujeres rescatadas son devueltas a su lugar de origen y vuelven a la misma situación, terminando en manos, nuevamente, de los proxenetas”.

LA SOCIEDAD

Rosa Díaz retomó la palabra, llamando a la comunidad y a los medios de comunicación a ser “entes generadores de conciencia para poder desterrar los mitos de la prostitución, como es ‘el que trabajan de eso porque les gusta’ o ‘que es un trabajo mejor que otros trabajos’”, denunciando que hay una idea instaurada en “hombres y mujeres que creen que lo único para lo que la mujer solamente sirve es para la actividad sexual”.

HISTORIA

Mirando en retrospectiva, Pierini comentó que “en el pasado, cuando había muchos varones solos en un lugar, tales como los trabajadores de las fuerzas de seguridad, peones de estancia y más en la actualidad con trabajadores petroleros, se instalaban prostíbulos para que pudieran satisfacer sus demandas sexuales”, agregando que posteriormente “se fue naturalizando la idea de que existan y sean lugares de esparcimiento”.

En relación a las denominadas ‘Casitas de la Tolerancia’, barrio rojo que estuvo en nuestra ciudad hasta entrado el año 2007, Pierini manifestó que se había “naturalizado, siendo que algunos decían que van a tomar algo, a divertirse, sin acceder al comercio sexual”.

OIM

Según informes de la OIM (Organización Internacional de las Migraciones), la trata de personas con fines de explotación sexual compromete a todo el territorio argentino y cubre, aunque con distinto peso relativo, tanto el fenómeno de la trata interna como la internacional, aunque “el negocio” de la trata interna tiene mayor dimensión. “Los lugares de destino por excelencia son las provincias de Buenos Aires, Córdoba, Entre Ríos, La Pampa, Chubut, Santa Cruz y Tierra del Fuego”, según informaron desde la OIM.

En relación a esto, desde el Equipo Diocesano denunciaron que la mayoría de las chicas víctimas son captadas en la zona norte del país y son trasladadas mediante engaños.

Asimismo remarcaron que hay una “complicidad oficial” y una “alta tolerancia social históricamente del sistema prostibulario, situando a la mujer como un objeto, cosificándola”.

ESTADO

Desde la entidad subrayaron que el Gobierno argentino incumple con los estándares mínimos en áreas clave para erradicar el delito de trata de personas, tanto en puntos estratégicos de tráfico de personas como en la aplicación de la ley en controles preventivos más estrictos.

EDUCACIÓN

Siendo la educación uno de los estamentos que permiten la transformación de la cultura, desde la entidad que elaboró el informe manifestaron que “es preciso promover el respeto por la dignidad de la persona para caminar hacia una sociedad más inclusiva y sin esclavos”, manifestando la necesidad de “políticas públicas que restituyan derechos y permitan librarse a las víctimas de la explotación sexual y prostitución; de la persecución penal efectiva contra los tratantes proxenetas y sus cómplices en todos los niveles del Estado, y de la asistencia integral a la víctima, brindando refugios de contención que permitan su protección”.

La Opinión Austral

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