DOMINGO, 1 de julio de 2018.- Los hechos ocurrieron el pasado viernes 29 de junio, cuando la comunicadora y locutora Lorena Uribe cubría la concentración de manifestantes contra el aborto frente al Hospital Regional Río Grande. La marcha fue convocada por médicos del nosocomio local en rechazo al proyecto de ley que legaliza el aborto.

Lorena Uribe,  comenzó a recibir agresiones verbales exigiéndole que se retirara del lugar, violentando el principio del libre ejercicio del periodismo. Ulises Barría, propietario de una radio FM  fue quien agredió verbalmente a la trabajadora de prensa, tratándola de «asesina».

Este tipo de agresiones no es la primera vez que suceden, ya que el pasado mes de febrero de este año el  entonces Secretario de Seguridad Ezequiel Murray arremetió a los gritos contra la periodista de El Fueguino Cecilia Zuñiga.

Lamentablemente, en ese momento fueron pocos los medios de comunicación que publicaron la información y repudiaron el hecho de violencia a la cual se sometió a la periodista.

En el caso de nuestra periodista, medios y periodistas independientes publicaron la información y se solidarizaron, otros trabajadores de prensa al verse impedidos de publicar la información en los medios donde trabajan, se solidarizaron en privado con la periodista de El Fueguino o hicieron público su repudio a título personal.

Lo verdaderamente lamentable fue que los auto titulados «adalides de la libertad de prensa y de los Derechos Humanos», los sectarios de siempre, hicieron silencio cómplice y se escondieron muertos de miedo debajo de la cama.

Uribe es una referente del movimiento feminista en Río Grande a favor del aborto seguro, legal y gratuito, y conduce junto a su colega Gabriela Bersier, también referente del movimiento feminista local,  el programa radial Tarde pero Seguro que se emite por FM Lider 104.1 de Río Grande.

Desde la redacción de El Fueguino manifestamos nuestra solidaridad con la trabajadora de prensa Lorena Uribe, y  con todos los periodistas que son agredidos en el ejercicio de la actividad periodística, además de repudiar cualquier tipo de actitud violenta venga de donde venga.

 

 

 

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