VIERNES, 23 de mayo 2025.- En medio de la creciente preocupación social y empresarial que generaron los decretos N° 333 y 334/2025 del Gobierno nacional, José Luis “Gigi” Iglesias, presidente de la Cámara de Comercio, Industria y Producción de Río Grande (CCIP), expresó su fuerte inquietud por el impacto económico, laboral y político que estas decisiones pueden tener sobre la provincia de Tierra del Fuego.
“Nos llena de consternación lo intempestivo de la medida”, afirmó Iglesias, señalando que el anuncio tomó por sorpresa a todos los actores locales, poniendo en riesgo no sólo fuentes laborales, sino la estabilidad del tejido social fueguino. Si bien algunas empresas –como el caso de Mirgor– aseguraron la continuidad de sus trabajadores, para el titular de la CCIP “la preocupación de la sociedad sigue vigente”, expresó a ElFueguino.
Iglesias fue más allá al subrayar que estas situaciones ya se han vivido en la historia reciente de la provincia, evocando la caída de los sectores digitales y textiles. “Al principio no se nota, pero después la gente empieza a cobrar tarde, mal o nunca”, advirtió, recordando experiencias pasadas que derivaron en crisis laborales y sociales profundas.
Para el referente del comercio riograndense, lo más grave no es solamente el contenido de las medidas, sino el modo en que fueron tomadas: “Hubo una falla en la conducción política, esto debió haberse abordado con diálogo y anticipación”. En ese sentido, planteó la necesidad de convocar a un consejo social o multisectorial que reúna a representantes políticos, empresarios, trabajadores y ciudadanía. “No para buscar culpables, sino para dar respuestas organizadas y con sentido común”, remarcó.
Además, Iglesias defendió con énfasis el régimen de promoción industrial amparado por la ley 19.640, que considera el pilar del desarrollo provincial. “No hay una provincia posible sin la 19.640. Tierra del Fuego se construyó sobre esa base”, sostuvo, al tiempo que reconoció la necesidad de adecuar el régimen a los cambios tecnológicos y al escenario mundial. “No podemos seguir fabricando CD ni cassettes. Tenemos que evolucionar, pensar qué hacemos con nuestros recursos energéticos, qué industrias queremos y cómo insertamos nuestra producción en el nuevo paradigma global”.
Finalmente, Iglesias criticó la falta de articulación política entre los gobiernos nacional y provincial y pidió mayor responsabilidad institucional: “No alcanza con repudiar medidas, necesitamos respuestas concretas. Hoy cada comerciante que paga un sueldo y sus aportes es un verdadero patriota. Está sosteniendo la soberanía desde su lugar”.
Con un llamado enfático al diálogo y a la acción colectiva, la Cámara de Comercio de Río Grande dejó claro que «el futuro de la provincia está en juego. La advertencia está hecha: sin consenso político ni estrategia compartida, las consecuencias podrían ser graves«, finalizó.
Comentario de Facebook